Sí, lo sabemos… si eres una novia del 2021 puede que la incertidumbre, los miedos o incluso la angustia se apoderen de ti. Por eso, en este post te damos unos consejos para que las ganas y la ilusión por que llegue tu gran día te inunden durante la espera. Y si, además, este año era el tuyo y decidiste aplazar la boda, ¡con más razón!
¿Conoces el término «pensamientos rumiantes»? Son aquellos que provocan preocupaciones, ansiedad y estrés ante dificultades que aún no se han hecho realidad. Por tanto, y lógicamente, no son algo bueno para la salud. Para evitarlos, intenta no pensar en problemas de este tipo en los que no puedes hacer nada o, al menos, de momento.
Así que te proponemos incluir una serie de rutinas semanales con las que acompañar a tus días hasta que se vaya acercando tu boda. Dejarás de pensar constantemente en ella de manera negativa, dejarás de preocuparte y conseguirás disfrutar de todos los avances conforme se vaya acercando la fecha. ¡Toma nota!
1. Ejercicio físico
Incluye el ejercicio físico como una rutina más en tu semana. Puedes hacerlo en casa, en un centro especializado o en la calle, según tus circunstancias.
Pero… ¿qué es lo que provoca? La liberación de endorfinas, las hormonas de la felicidad, la producción de norepirefrina, un químico que puede moderar la respuesta del cerebro al estrés y los neurotransmisores liberados durante y después de practicar ejercicio que ayudan a liberar la ansiedad y calmarse.
2. Cuídate
¡Date caprichos! Córtate el pelo, hazte la manicura, un tratamiento facial o un mansaje en la espalda en un centro especializado o, incluso, puedes hacerlo en casa involucrando a tu pareja para que te haga ese masaje tan deseado.
Cuidarte a ti mismo es una parte importante del desarrollo de la fortaleza mental. El cuidar de sí mismo puede ayudarte a reconocer tus respuestas emocionales al estrés y desarrollar habilidades de afrontamiento para manejarlas.
3. Lee y ve series y películas
Sin duda la mejor forma de salir de la rutina es dejarse llevar por las historias de otros. Tómate un descanso de tus obligaciones diarias, relájate y sobre todo no pienses en lo que te preocupa.
Al relajarnos, reducimos los niveles de cortisol del cuerpo, hormona que se libera con el estrés y respiramos más lento, reduciendo la presión arterial. Además, la lectura nos enriquece a nivel mental, ayudando a nuestro cerebro a funcionar de forma óptima.
4. No te quedes en casa
¡Que ni la pandemia, ni el frío o los días cortos sean una excusa! Hoy es más necesario que nunca salir a la calle a tomar el aire. Queda con una amiga para ir a andar, con tu pareja para pasear o con tu madre para comprar.
Los beneficios, tanto de la vida social como de salir a la calle son claros: mejora el estado de ánimo, disminuye los pensamientos negativos, ofrece un mayor equilibrio emocional, nos expone a otros estímulos y mejora el rendimiento cognitivo.
5. Haz lo que te gusta
Apuesta por ese hobby o actividad que habías abandonado hace tiempo y retómala. Desempolva tus puzzles, tus pinturas, tu video consola o ese juego de cartas con el que tanto te reías.
Sin darte cuenta mejorarás la memoria visual, la habilidad espacial y matemática, el autocontrol y reflexión, el desarrollo psicomotriz y un sinfín de aspectos más. ¿Qué más se puede pedir?
Y lo más importante: haz un calendario semanal con el que realizar al menos una vez cada una de estas actividades. ¡Verás cómo enseguida notas los cambios!
El coronavirus ha llegado, pero no para quedarse y las bodas volverán a celebrarse. Estar lista psicológicamente es tu prioridad. Uno “solo” se casa una vez y tiene que disfrutarlo… así que comienza ya con tus rutinas y cuéntanos la que echas en falta para que podamos añadirla.