¿Cuál sería el número ideal de personas que te gustaría invitar al banquete? Establece esta cifra en función de tu presupuesto y del tipo de boda que habéis imaginado.
Te aconsejamos elaborar varias listas: una de imprescindibles (los que no deben faltar en tu boda como tu familia más cercana o amigos más especiales), otra de posibles que te encantaría invitar pero no tienes un vínculo tan cercano y otra de compromisos ajenos (por ejemplo, de tus padres).
Estas listas te ayudarán a elaborar una lista de invitados con el número justo.
Ya has decidido quién se queda fuera, ¿cómo quedar bien con ellos?
Evidentemente la reacción dependerá del tipo de persona y de cómo le des la noticia. Eso sí, si crees que alguien se considera a sí mismo como posible “invitado”, lo más importante es adelantarte y decírselo antes de que haga conjeturas.
La clave también es que le hagas partícipe de los detalles de organización de tu boda aunque no esté en la lista de invitados. Incluso si tienes mucho compromiso con esa persona, puedes invitarle otro día a un café o unas cañas para celebrar vuestro enlace, un encuentro informal entre amigos.
“Vamos a hacer una boda íntima a la que sólo asistiremos la familia. Por la relación especial que tengo contigo, vamos a invitar a los amigos y otros familiares más especiales a un vermú informal y me gustaría invitarte”. Ponte en su lugar, seguramente aceptarías ¿no?
Haz que parezca un alivio
¿Cuántas veces has ido a una boda y has pensado que lo mejor es que no te inviten si no es alguien muy cercano? Pagar el vestido, el regalo, el desplazamiento o noche de hotel si es necesario... ir de invitado a una boda es toda una inversión.
Tener esto en cuenta, te ayudará a no sentirte tan mal cuando confecciones la lista. Eso sí, si dejas fuera a alguien con quien tienes más o menos relación, deberás cuidar los detalles para que vuestra amistad no se vea afectada.
Sea cual sea la decisión que tomes, avisa con antelación
¿Te ha pasado alguna vez que algún familiar o amigo pensabas que iba a invitarte a su boda y no fue así? No hay nada peor que dar la callada por respuesta, por lo que cuando tengas la lista confeccionada, deberás hablar con aquellas personas a las que no hayas invitado y quieras quedar bien. Quizás puedes ofrecerles un pequeño detalle o recuerdo de vuestro enlace. Que no lo invites a la boda no quiere decir que no puedas tener un buen gesto.
(Luciasecasa)
Relájate
Organizar una boda conlleva ciertos momentos de estrés y uno de ellos consiste en la elaboración de la lista de invitado. Piensa que siempre tienes que cortar por algún lado, así que no te martirices por ello y recuerda que las personas que te quieren y los amigos de verdad seguirán siéndolo siempre, pase lo que pase.
