Has sido elegido para desempeñar el papel tan importante de ser padrino de boda. Ya sea la boda de tu hija, tu hijo, un amigo o familiar cercano, tienes el gran honor de desempeñar un rol fundamental en cualquier enlace. ¿Sabes cómo hacer que todo sea perfecto? A continuación te mostramos algunos consejos para que seas el mejor padrino de boda y que todo salga como esperáis.
Consejos para padrinos de boda
1. Antes de la boda
Desde el momento en el que te comunican la buena noticia, puedes empezar a trabajar ayudando a los novios para que todo sea perfecto. Si eres el padre de la novia, es posible que tu nombre aparezca incluso en las invitaciones de boda, o sea que desde el principio jugarás un papel activo en la preparación del gran día. Tu papel es el de asesorar, apoyar y echar una mano a los novios en la organización de la boda.
También es posible que, si eres padre de alguno de los contrayentes incluso sufragues parte de los gastos del enlace, por lo que deberás tomar muchas decisiones. Eso sí, aunque tendrás que organizar diversos aspectos de la boda, tu papel debe ser más de asesoramiento, ya que el protagonismo principal lo tienen los novios.
Si eres amigo o hermano del novio, es probable que también seas el encargado de organizar su despedida de soltero. Quién mejor que tú para planear un día divertido previo a la celebración. Intenta sorprender al novio y organízale una fiesta que encaje en sus gustos y que siempre recordará.
Otro momento importante previo a la celebración es la elección del traje de novio. Tendrás que acompañar al protagonista de la boda en el proceso de la compra del traje. Como veremos más adelante, la elección del vestuario del novio determina en buena parte cómo tienes que ir tú como padrino.
La elección del banquete también constituye otro momento clave de los preparativos. Suele ser habitual acompañar a los novios a la prueba de algunos de los platos para poder hacer la elección del menú que compondrá el banquete de bodas. Intenta no interferir en la decisión final de los novios, ya que al fin y al cabo es la que debe prevalecer.
2. El día de la boda
La jornada va a ser intensa, así que tienes que asegurarte que todos los detalles están cerrados y acordados, al mismo tiempo que puedes ir supervisando cómo se van desarrollando todos los aspectos de la boda: que el coche salga a sus horas, que se cumplan los horarios previstos, que estén todos los detalles perfectos... Ese día los novios estarán demasiado ocupados en otros quehaceres, así que agradecerán un poco de apoyo por tu parte.
Uno de los momentos clave como padrino de boda es el camino hacia el altar. Es un instante simbólico en el que podrás caminar el brazo de la novia hasta el lugar en el que va a dar el “sí quiero”. Seguro que sientes una emoción muy especial que siempre recordarás.
También vivirás otros momentos importantes a lo largo de este gran día. Serás el encargado de hacer un brindis por los novios, así que puedes preparar un discurso emotivo que seguro les encantará a la pareja de recién casados. Otro instante clave es el baile nupcial. Después de que los novios abran el baile, podrás acompañarles junto a la madrina y después se irán uniendo el resto de invitados. El baile con la novia también será un momento muy especial.
(Vogue Spain)
3. Después de la boda
Es la ocasión de hacer balance y quedar bien con los invitados más cercanos. Es común que los novios redacten alguna tarjeta de agradecimiento. Tú puedes hacer lo propio agradeciendo a tus invitados más allegados el haber formado parte de un día tan especial, así como preguntarles sus impresiones sobre cómo ha ido la boda.
Cómo vestir para ser el padrino de boda más elegante
(bridalmusing.com)
El vestuario es muy importante para lucir perfecto en el gran día. Ten en cuenta que a la hora de elegir tu traje, deberás conocer cómo va a ir vestido el novio, pues determina en buena medida cómo debes ir vestido tú para no saltarte el protocolo.
¿Chaqué, traje y corbata, smoking…? Todas son opciones muy elegantes con las que lucirás impecable. En las ceremonias religiosas el chaqué es un opción perfecta y sofisticada, perfecta para bodas de mañana y media tarde. Para el color del chaleco elige tonos clásicos como el gris marengo, el negro, o el azul marino.
Si el novio se casa con traje, tú también deberás llevarlo y de un color que sea en la misma gama que él ha elegido. Huye de tonos claros, beiges y blancos, a no ser que los novios os indiquen lo contrario y sea requisito imprescindible ir de blanco a la boda.
Los complementos también son importantes. Elige un pañuelo, gemelos, corbata o pajarita que marquen ese detalle distinguido y elegante. ¡Al fin y al cabo, uno es padrino una o dos veces en la vida! Para el calzado, unos zapatos estilo Oxford con cordones son un acierto seguro, y el negro, el color más elegante para vestir tus pies.